Cientos de familias dedicadas a la actividad agropecuaria de los sectores de San Ramón, Dógola Dogolita y Agua Fría de la parroquia Rosa Zárate, en el cantón Quinindé, han mejorado en su economía y condiciones de vida, gracias a la construcción de un puente bailey por parte de la Prefectura de Esmeraldas.

“Varias décadas tuvieron que pasar para que la obra llegue y de un giro total en la movilidad a los agricultores, facilitando el traslado de sus productos hacia los diferentes mercados, dejando atrás años de prejuicios y abandono”, señaló Kelvin Mejía, Morador del sector del Dógola.

“Salir de las comunidades tomaba horas y a veces días para poder trasladarse hacia otros recintos, además las cosechas de cacao, maracuyá y la producción de queso ya se pueden comercializarlas, gracias al puente que construyó la prefecta, Roberta Zambrano”, expresó Nelson Loor, agricultor de Santa Rosa.

Gardel García, se dedica a la transportación de los moradores de las diferentes comunidades y contó que ha sido maravilloso la construcción del puente y que han tenido un cambio total. Antes con la llegada del invierno se dificultaba la movilidad de todos los campesinos, acotó el transportista.